Ha sido un año salvaje y terco como un animal asustado. Pesado y liviano, de mucho aprendizaje y primeras veces, hasta cierto punto, apretadísimo aquí dentro . Algunos meses deseando que termine para poder iniciar nuevos sueños . Sin embargo, estos últimos días han sido suaves un diciembre diferente a los que viví y se que en gran medida es gracias a un amor que no deja de crecer y que hay dias en los que se parece a los árboles. Y lo sé porque cuando estoy cerca de ella respiro muchísimo mejor. Soy una persona afortunada porque soy capaz de aflojar la soga con palabras y eso es siempre lo que me rescata, no me rindo nunca cuando quiero algo de verdad. Este año también lo logré no solo sobreviví, viví sobretodo, sean sencillos y cercanos, ese es mi deseo. ❤️

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